Por Tamara Idrobo
Los comportamientos egocéntricos y narcisistas de un hombre criollo que se siente emperador y que tiene ansias de reconocimiento, se caracterizan por el tener y acumular cualquier tipo de poder creyéndose dueño absoluto de su verdad. Verdad que refleja tan solo su triste necesidad de sentirse poderoso para poder alguien ser.
Cual emperador criollo, no de Roma sino en un triste, dolido y violentado Ecuador, ejerce su poder para imponer sus deseos y necesidades siendo incapaz de responsabilizarse de sus comportamientos y decisiones.
El #EmperadorCriollo se gesta en una infancia caracterizada por perversas dinámicas familiares donde el tener y sostener poder es la única referencia para crecer y llegar a ser.
Existen de esos nefastos emperadores que se gestan en una madre que justifica innumerables violencias y traiciones recibidas por parte de un esposo obsesionado con el poder que solo el dinero puede dar.
Madre a la que solo le importa proteger el estatus económico y la reputación social familiar, por lo que acepta las infidelidades del esposo que, como un emperador criollo también, violenta a ella y a su hijo rechazándoles y repudiando cualquier posibilidad de construir y mantener relaciones de amor y apego sanas, porque solo al padre solo le importan los placeres que el poder del dinero le garantizan.
El emperador criollo para ser emperador debe construir su personalidad sobre la base de un poder que le permita encarnar tan ansiado rol en su adultez.
Su perversa personalidad se construye desde la sobrevivencia de cada una de las tristes vivencias de abuso, abandono, desamor y desapego recibidos por parte de su padre y/o madre.
El #EmperadorCriollo aprende desde muy niño que solo el tener poder (sea éste económico, político, de autoridad o cualquier otro) lo valida y lo avala para lograr ser aceptado.
Encarna su rol de emperador presentándose públicamente como un hombre impoluto, sano, elegante y esbelto, demostrando altos estándares de moralidad y perfeccionismo.
Para poder lograr la aceptación, busca mantener su poder a través de denostar a todas las personas que ‘le estorben’ en alcanzar sus objetivos, ya que las personas existen para él solo para servirlo.
Las relaciones de pareja del emperador criollo se caracterizan por ser con mujeres vulnerables y necesitadas afectivamente a las que él pueda someter.
Algunas de estas mujeres terminan subordinándose para mantenerse en esa relación pese a ser despreciadas continuamente. Quienes se quedan a su lado son mujeres con necesidades imperiosas de aceptación que, teniendo orígenes humildes y negándolos, deciden subordinarse a las demandas del emperador criollo con tal de sentirse aceptadas y lograr ser parte del estatus económico y de la clase alta de la sociedad a la que ellas tanto anhelan pertenecer.
El #EmperadorCriollo ejerce sin hesitar ni un segundo ni guardar remordimiento alguno, todo tipo de violencias. Dominando, anulando, agrediendo y atacando con todo su poder y de forma desproporcionada a cualquier mujer que lo incomode o que se atreva a cuestionar sus acciones y decisiones.
Muchas son las personas, incluidas sus hijas y/o hijos quienes terminan sufriendo las agresiones promovidas por las órdenes del emperador criollo que todo lo cree dominar.
Las violencias que un emperador criollo ejerce sobre las mujeres no son obvias. Si son golpes físicos, él se asegurará de que las marcas que dejan sus golpes no sean visibles.
Las violencias que el emperador criollo prefiere ejecutar son proporcionales a su crueldad. Éstas son atroces y feroces en las que están: la violencia económica y patrimonial, la violencia emocional y/o psicológica y la violencia vicaria.
La #ViolenciaVicaria es una de las expresiones más crueles de todos los tipos de violencias de género que consiste en herir a una mujer a través de ejercer violencias a sus seres queridos, en especial a sus hijas y/o hijos.
La #ViolenciaVicaria puede incluir el amenazar con causar daño a las hijas y/o hijos; retener, ocultar o sustraer a menores de edad fuera de su hogar; interponer acciones legales (juicios penales) usando hechos falsos, distorsionados o inexistentes; buscar obtener la patria potestad o tenencia de hijas y/o hijos; imponer condiciones para el cumplimiento de obligaciones de las pensiones de alimento, etc.
El #EmperadorCriollo necesita regocijarse de violentar a una mujer y está dispuesto a hacerle daño inclusive si implica herir y dañar a sus propias hijas y/o hijos. Y es que como él creció recibiendo violencias por parte de su padre y/o madre, su referencia sobre el rol de su propia paternidad se aleja de toda normalidad.
Cualquier poder que tenga el emperador criollo le hace sentirse superior y por eso necesita continuamente reafirmarse a través de actos, comportamientos y decisiones con desmedida crueldad para causar dolor a aquellas mujeres que a sus deseos y antojos no se dejaron someter.
Por eso, él siempre buscará ocultar o distorsionar el verdadero significado de sus actos, comportamientos y decisiones crueles en las que incluyen: hundir emocional y económicamente a sus víctimas a través de hostigamientos laborales, aislamiento social, destrucción de la reputación personal y profesional llegando poner en contra de sus víctimas varias demandas de juicios penales al mismo tiempo en un corto periodo.
El #EmperadorCriollo no se conmueve ni siquiera por el dolor que llega a infringir a sus propias hijas y/o hijos con tal de perseguir, hostigar, violentar y agredir a la mujer que se negó a ‘soportarlo y aguantarlo.’
ÉL siempre busca amenazar y abrumar a sus víctimas hasta conseguir minar su salud mental. Y es que, en su perversidad, el emperador criollo cree tener toda la potestad para disputarles a sus víctimas todo. Incluyendo la tenencia de las hijas y/o hijos con el uso de argucias legales que incluyen faltas graves y la violación de debidos procesos que, con el uso de su poder, se asegura de usar a la justicia a su favor sin importarle ni un miligramo el bienestar de sus hijas y/o hijos.
Un #EmperadorCriollo que ejerce #ViolenciaVicaria es el que usa y abusa de las normas legales, negándose a dar su firma para permitir que su hijo nacido en otro país (hijo que abandonó sin ni siquiera asegurar una pensión digna que cubra sus gastos básicos y elementales), pueda retornar al país de su madre, donde ella tiene a toda su familia y red de apoyo esperándola, porque él -obviamente- se aseguró de que ella tenga que enfrentar varios juicios que él le puso para violentarla como venganza cuando ella decidió hacer pública la denuncia de las violencias a las que él le sometía.
A través de la #ViolenciaVicaria, el #EmperadorCriollo se obsesiona con impedir que su víctima pueda retomar su vida personal y profesional.
Con toda la impunidad que por creerse emperador tiene, él se pasea libremente por instituciones de los poderes gubernamentales a vista y paciencia de todas las personas que conocen y saben de sus actos de violencia vicaria perpetrados en contra de su expareja y madre de su hija y/o hijo.
La #ViolenciaVicaria es incomprendida, ignorada y no reconocida en el #Ecuador, donde demasiados emperadores criollos con poder la ejercen con tanta frecuencia e impunidad.
Es imperante que en el Ecuador empecemos a hablar y a debatir sobre la necesidad de tipificar en el #CódigoOrgánicoIntegralPenal a la #ViolenciaVicaria.
Ecuador es un Estado liderado y sometido a los deseos y complejos de tantos emperadores criollos que omiten y anulan con obsesiva dedicación, todas las acciones que puedan permitir la ejecución e implementación íntegra de la Ley Orgánica Integral Para Prevenir y Erradicar La Violencia Contra Las Mujeres. Ley que entró en vigencia en el registro oficial No.175 en febrero del 2018 y que hasta la fecha carece de presupuesto para su implementación, monitoreo, evaluación y revisión.
El #EmperadorCriollo es apenas un pobre hombre atemorizado con pavor de perder su poder. Porque lo único que él busca resolver es su permanente fragilidad a través de infligir dolor a quien se atreva a develar su debilidad.
¿Debemos temer a un emperador criollo que sin poder nada pueden resolver?
¡NO¡
Porque el pobre y desdichado emperador criollo
ni con todo el poder que llega a tener,
y así él quiera pretender,
sus dolores nunca logrará resolver.
Aunque a su parecer,
a su alma quiera satisfacer,
cuando a las mujeres que él debería proteger,
él solo busque usar, atacar y demoler,
para sus intereses defender y favorecer.
Cuánta miseria en su alma un emperador criollo debe tener,
que ni con tanto esfuerzo su temor y falta de amor logra esconder,
porque con el abuso de su poder,
que usa constantemente para violentar y someter,
solo apenas un triste y frágil emperador criollo podrá llegar a ser.