Por Javier Briones Delgado
Quizás suene trágico o bastante exagerado el título del presente texto, sin embargo, si realizamos un breve recuento de las últimas manifestaciones a nivel regional, fácilmente me darían la razón.
Empecemos por las protestas sociales de Bolivia en el mes de Octubre del 2019, tuvieron como génesis, las elecciones presidenciales del mismo mes y año que se realizaron en aquel país, las cuales dieron como ganador a Evo Morales, quien terminaría renunciando por presión de los opositores y por sugerencia del alto mando militar, para luego la oposición con beneplácito de la OEA, hacerse de la presidencia de facto, nombrando a Jeanine Áñez como presidenta del gobierno transitorio, en la actualidad, Áñez, sus ministros de entonces, y varios militares se encuentra cumpliendo prisión preventiva acusados de varios delitos entre ellos atentar contra de la Democracia.
En Chile 2019, el detonante de las protestas en Octubre, fue el alza de 30 pesos chilenos al pasajes del metro, pero no fue el único motivo “..no son 30 pesos sino 30 años de guardar bronca..” decía un protestante, el poco acceso a la seguridad social, la educación pública, lo cual contrasta la percepción que se tenía sobre Chile, bueno al menos de quienes se creían la publicad de país exitoso, en un país donde la brecha social se acrecentaba y a la clase media le costaba cada día más mantenerse en aquel estrato social. Como resultado varios muertos y heridos, Sebastián Piñera denunciado por crímenes de Lesa Humanidad, un referéndum en octubre del 2020 que fue aprobado en su mayoría (más del 78%) por quienes sufragaron para cambiar la constitución dejada como legado del dictador Augusto Pinochet.
En Colombia 2021, recientemente gran parte de colombianos salieron a marchar por la intención de aprobar una “Ley de Solidaridad Sostenible” que gravaran los ingresos de los colombianos que perciban más de $663, y que del total que se espera recaudar, el 73% será aportado por personas naturales y el resto por personas jurídicas. Actualmente, se encuentra en curso las protestas y ya lleva algunos muertos a cuestas, llamados de atención de organismos internaciones por el uso excesivo de la fuerza pública contra los manifestantes, posiblemente terminaría como historia repetida de los párrafos anteriores o peor.
En Ecuador Octubre del 2019, se protesta por el alza del precio de los combustibles al disminuir y/o eliminar subsidios, entre otros motivos, varios muertos y heridos como resultado, el presidente actual y ministros denunciados por grave vulneración a los DDHH. En mayo 24 del año en curso, se posesionará el presidente electo Guillermo Lasso, a quien su suerte no solo estará echada a consecuencia de sus actos, sino a factores exógenos como por ejemplo, que no aparezca un “Cisne Negro” como diría Nassin Taleb, esto es, deberá tomar cada decisión en consenso y, con la precisión de un reloj suizo, pues cualquier medida antipopular podría ser la chispa o detonante para protestas masivas y como efecto podría ser el fin de su mandato, en conclusión, hecatombe a la vista.
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