Por Miguel Ruiz Acosta

El Interamerican Institute for Democracy (IID) es uno de los think tanks de la derecha regional…con sede en Miami. De acuerdo al Reverendo y analista político venezolano radicado en Costa Rica, José Alberto Amesty Rivera, el IID «es considerado una de las casas de retiro de los Agentes de la Central de Inteligencia Americana (CIA) latinoamericanos». Su presidente fue hasta hace poco (2015-2020) Carlos Alberto Montaner, uno de los voceros más conspicuos de la derecha de origen latinoamericano afincada en la Florida y cercano colaborador de la CIA. Montaner fue recientemente reemplazado por Tomás Regalado, otro político cubano-norteamericano, quien, además de ex alcalde de Miami, fue director de Radio Martí y periodista de Univisión. Por su parte, el actual Director Ejecutivo del IID es Carlos Sánchez Berzaín, boliviano que fue ministro de la presidencia, de gobierno y de defensa durante los dos periodos del empresario Gonzalo Sánchez de Lozada. Las últimas dos publicaciones de Sánchez Berzaín son Castrochavismo. Crimen organizado en las Américas (2019) y Ofensiva del castrochavismo (2020). La directiva del IID está conformada por un puñado de representantes de la derecha dura latinoamericana de diversos países, como la periodista ecuatoriana María Fernanda Egas, también residiendo en Miami; o por el expresidente Oswaldo Hurtado.

El 27 de enero el IID organizó un Foro sobre la coyuntura electoral en donde participaron como panelistas Pablo Lucio Paredes, Patricia Estupiñán de Burbano, María Fernanda Egas y Oswaldo Hurtado Larrea, todos ellos ecuatorianos de la derecha política y mediática quienes mostraron su consenso respecto al peligro del retorno de un gobierno de carácter progresista al país. Por supuesto, que eso que es visto como «amenaza» a la democracia se presenta en su discurso como un gobierno autoritario y posible aliado de las «dictaduras» del resto del mundo, según palabras de Hurtado. En ese mismo sentido, Tomás Regalado, presidente del Instituto, cerró el Foro señalado el riesgo de que se repitiese una «catástrofe electoral» como las de Venezuela y Bolivia, en donde las opciones de derecha fueron barridas en las urnas. Parecería ser que para este tipo de posiciones, la democracia sólo es tal cuando las fuerzas conservadoras que ellos representan logran las victorias políticas (por la vía electoral… o por la fuerza).

No obstante, más allá del consenso conservador del mencionado foro, preocupan las denuncias del citado José Alberto Amesty quien, en reciente nota de prensa, realizó una advertencia respecto a una reunión que se habría realizado el 4 de enero en Miami. De acuerdo al analista, la reunión fue coordinada por el propio Director del IID y la excongresista republicana Ileana Ros-Lehtinen (también cubano-americana) y contó con la participación de un representante del anticastrista Directorio Democrático Cubano, así como de John Suarez, director de programas para América Latina de la Freedom House, otro de los thinks tanks de derecha con sede en Washington. Según la misma fuente, uno de los principales propósitos de ese encuentro habría sido la de sumar los esfuerzos de los participantes para «obstaculizar una probable victoria del binomio Andrés Arauz-Carlos Rabascall», mediante la intensificación de los ataques mediáticos a ese binomio y al resto de la Lista 1, afín al expresidente Correa. En concreto, Amesty sostiene que el mecanismo específico de esa estrategia sería suministrar información falsa a los candidatos de derecha «para que la utilicen en sus campañas, debates y declaraciones a la prensa». De ser verídica esa información, estaríamos ante uno más de los múltiples intentos de las redes de la derecha continental para torpedear cualquier posibilidad de que los pueblos de Nuestra América podamos decidir, con completa libertad e información verídica, sobre nuestro futuro político inmediato. Debemos permanecer muy atentos para denunciar las fake news que se cocinan en los hornos de los «tanques de pensamiento» de la derecha continental: la criolla y la de Miami.

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