Por Pedro Pierre

Pocos días después de celebrar, el 14 de febrero, la fiesta del amor y de la amistad cayó la noticia bomba de la corrupción entre los miembros del ejecutivo, salpicando más especialmente al presidente. Todo un archivo de investigación policial escondido que salta a la vista del país y del mundo, con toda una cadena de corrupción al más alto nivel del Estado. ¡Increíblemente vergonzoso! Pero el gobierno es nuestro espejo a causa de nuestra mucha complicidad e irresponsabilidad frente la corrupción generalizada. Sólo la puesta en marcha de una verdadera fraternidad organizada entre nosotros y por nosotros nos ayudará a salir adelante.

ECUADOR AL TOPE DE LA CORRUPCIÓN, Pedro Pierre

              Las revelaciones sobre la corrupción mayúscula del ejecutivo se multiplican y nos llenan de vergüenza. Pero bien pocos tenemos el valor de manifestar nuestra desconformidad para que el presidente se vaya a la cárcel. El mismo gobierno, con la complicidad del presidente Lenin Moreno, han ido pervirtiendo todas las entidades estatales llenándolas de cómplices y de corruptos… que hemos aprobados al votar 6 veces ‘SÍ’ o al votar nulo o blanco o a abstenernos en la consulta mañosa del del gobierno anterior. Felizmente no hemos caído en la misma trampa al rechazar la nueva consulta mañosa que fue una bofetada al presidente Lasso

              Pero ¡al golearlo con un claro 8 a 0! en la consulta no es suficiente: Hay que ‘pasar de la palabra al hecho’, y se ve que hay todavía ‘mucho trecho’ entre el grito de rechazo y su realización: Nos quedamos en palabras que se las lleva el viento. Si no reaccionamos activamente, presionando los legisladores y organizándonos contra un sistema de corrupción para sustituirlo, es muy probable que nos siga gobernando dos años más el mismo presidente, con la misma corrupción, las mismas mentiras y la misma desfachatez.

              La razón es que hemos hecho de la corrupción un modo de vivir y de mal vivir. Nuestra calidad de vida depende de nuestra organización y de nuestra dignidad. Lastimosamente las dos están por los suelos. Estamos sumamente desorganizados y con bien poca dignidad. La vida en sus distintas dimensiones es el resultado de una organización muy compleja. Escribía alguien hace poco: “El hecho de vivir es un milagro permanente” … Se degrada la vida o se la pierde cuando dejamos de cuidarla mediante nuestra organización a todos los niveles… Lo peor es que, muchas veces, es en nuestra casa donde estamos de los más desorganizados. Si no somos capaces de ser responsables, honestos, fraternos, solidarios en familia, peor lo vamos a lograr fuera de ella. Y así, poco a poco, de complicidades en complicidades y de irresponsabilidades en irresponsabilidades, estamos llagando al tope de la corrupción. ¡Bien poca dignidad nos caracteriza, lastimosamente! El gobierno no es más que el espejo fiel de sus ciudadanos.

              Está pasando lo mismo con la violencia que siembra muerte sin descanso en nuestros barrios por el maldito tráfico de drogas. Desde décadas, diría a lo menos 3, hemos dejado que el consumo y el tráfico de drogas se instalara en nuestros barrios, en la vecindad y en nuestras familias. Allí están los resultados, por desorganizados y cómplices. Es cierto que los gobiernos neoliberales han visto en esta situación un efecto que los favoreciera: que los pobres se maten entre sí: “¡Menos boca, más me toca!”, que los jóvenes se droguen para que se vuelvan inútiles y perfectos esclavos: “¡No dejan la cancha libre para hacer y lograr lo que nos da la gana!” Y “¡que las mafias de la droga se encarguen de las cárceles, del sicariato y de las extorsiones para limpiar toda esa basura de la pobreza y de la drogadicción!” Allí también, están campantes las 2 grandes fallas nuestras: la desorganización y la falta de dignidad.

              Está también la falla de las religiones que están para defender a las víctimas de la maldad. Existen no sólo para denunciar y condenar la corrupción, los asesinatos y las extorsiones, desvelando las causas, sino también, por una parte, para hacer conciencia de nuestra dignidad de hijos de Dios y de hermanos y hermanas y, por otra, para fomentar la responsabilidad individual y la organización sociales. Los católicos nos contentamos de escuchar al papa Francisco que denuncia el neoliberalismo como un sistema de muerte y que promueve “la fraternidad sin frontera, la amistad social y el amor político”. Bien pocos obispos y clérigos se encargan siquiera de repetir sus palabras. En las religiones, hay mucha complicidad y responsabilidad con la corrupción generalizada y la desorganización social. ¡Cuán lejos estamos de único mandamiento de Jesús!: “¡Ámense los unos a los otros como yo lo he amado!”, es decir, ¡organícense para amarse los unos a los otros!

              Las últimas elecciones de autoridades y de rechazo a la consulta demuestran una cierta toma de conciencia que “estamos mal y bastante mal”. Hace unos días, un medio de comunicación internacional ponía como título a un reportaje sobre la violencia en nuestro país: “¡Ecuador al tope del crimen!” Así no miran y nos califican al nivel mundial… El gobierno, el sicariato, la extorsión, la desorganización, la dignidad por los suelos, la fe sin compromiso… son los caminos a un auto-suicidio. ¿Todavía necesitamos más para reaccionar?

              ¡Basta de rechazo, basta de palabras, basta de indiferencia e individualismo, basta de una fe muerta…! ¡A sentir las lágrimas de las madres que lloran a sus hijos muertos, a sufrir la desesperanza que pasan los jóvenes, a escuchar el grito de Dios en tanda dignidad pisoteada! Dios quiere varones y mujeres que vivamos de pie, en dignidad y en fraternidad organizada. Así iremos abriendo caminos nuevos para una Ecuador nuevo. Es más que tiempo.

BOYA DE SALVACIÓN: LA AMISTAD SIN FRONTERA DEL 14 DE FEBRERO

              El origen de esta fiesta de la amistad y del amor es muy antiguo. Se cuenta que por el siglo tercero de nuestra era el emperador romano dictó un decreto que prohibía a los saldados casarse mientras estaban en el ejército. Pretextaba que disminuía su dedicación a la tarea miliar. Sin embargo, un sacerdote cristiano siguió bendiciendo en secreto matrimonio de soldados. Al enterarse de esta situación, el emperador mandó a matar a dicho sacerdote. El hecho ocurrió un 14 de febrero… Por esta razón, ese día pasó a ser recordado como el día de la amistad y del amor hasta nuestra época, … incentivado por los negocios de flores y de regalos.

              Esta celebración nos da la oportunidad de profundizar sobre la importancia de la amistad ya que nos encontramos en un sistema que nos hace cada vez más individualista, indiferente y consumista. Si preguntamos sobre el sentido de la amistad notamos que es considerada muy importante por las distintas generaciones, de la adolescencia hasta la vejez: “No se puede vivir sin amistad” – “La amistad es lo más sublime” – “El individualismo y la indiferencia son signos de deshumanización: ¡La amistad tiene que ser nuestra bandera!” Etc. Hasta la Biblia tiene una linda página sobre la amistad en su libro llamado ‘Sirácides’: “El amigo fiel es un refugio seguro: El que lo halla ha encontrado un tesoro. Un amigo fiel es como un remedio que te salva”. En cuanto al libro del “Cantar de los Cantares” es todo un himno al amor.

              Tal vez las dos mayores cualidades de la amistad sean la fidelidad y la gratuidad. Escuché hace poco esta afirmación: “Cuando es verdadera, la amistad comienza y no termina nunca”. Puede ser que entre las y los amigos haya menos infidelidades que en el amor conyugal… La fidelidad es una de sus características, como la gratuidad: uno da amistad sin esperar recompensa ni contraparte. La amistad ofrecida es también la manera de probar quién es quién. Las personas egoístas no tienen amigos. Los hombres de negocios tampoco. Da qué pensar la frase de un presidente de Estados Unidos: “¡No tenemos amigos, sino intereses!”

              Ahora, el papa Francisco nos invita a abrir la amistad a nuevas dimensiones. En su Carta “Todos somos hemos y hermana”, nos revela su sueño de una humanidad reconciliada mediante la hermandad universal. No sólo habla de “fraternidad sin frontera” sino que nos invita a “la amistad social y al amor político” … expresiones novedosas que nos abren nuevos horizontes y nuevos compromisos. Con la mundialización, nuestro mundo se ha hecho ‘una aldea pequeña’. El papa, retomando una comparación del profeta Isaías, nos invita a abrirnos a nuevas amistades con la comparación siguiente: “Ensancha el espacio de tu tienda, sin demora despliega tus toldos, alarga tus cuerdas y refuerza tus estacas, porque te extenderás a derecha y a izquierda”. Con las muchas guerras, las dominaciones de unos países sobre otros, los saqueos de materias primas, las imparables destrucciones de la naturaleza, las tensiones por quién tendrá la hegemonía planetaria presentes nos llevan a la desaparición de la vida en la tierra. Por eso estamos llamados a abrir nuestras amistades más allá de su dimensión individual, para que llegan a ser ‘sociales, colectivas, comunitarias’. Lo mismo nuestro amor tiene que crecer más allá del color de la piel, la opción religiosa, las preferencias sexuales, la distancia y las fronteras. Solamente así seremos hombres nuevos y mujeres dignas, jóvenes entusiastas y adultos mayores esperanzados.

              Para los cristianos, fuera bueno invocar a san Valentín para despertar las amistades y, como dice el papa Francisco, multiplicar la ‘amistad social’ para revertir el desastre nacional provocadlo por el desgobierno actual castiga en las urnas el domingo pasado y la vergonzosa corrupción del poder ejecutivo. Amistades a recomponer entre vecinos, compañeros de trabajo, desempleados… para reconstruir el tejido social, la fe en nosotros y constituirnos en ‘poder popular’ para exigir nuestros derechos, cumplir con nuestros deberes ciudadanos y levantar un Ecuador de más igualdad y justicia. Los seguidores y admiradores de Jesús de Nazaret tenemos que imitarlo con “el Maestro de la Amistad” que supo unir y reunir a sus paisanos en torno a su proyecto del Reino, es decir, de un mundo de fraternidad, amistad y amor. Comenzó formando su Comunidad de discípulos, varones y mujeres, encontrando entre ellos una docena de amigos incondicionales. Si uno lo traicionó, los demás dieron la vida por él. Sus amigas las mujeres levantaron las primeras Comunidades cristianas cuyos ideales llegaron hasta nosotras y nosotros. Comunidades de amigos y amigas que vivieron por una vida mejor y que la dieron para un mundo mejor. Ecuador necesita en estos momentos varones y mujeres de esta calidad, fe y compromiso.

              Qué san Valentín nos ayude a romper leyes y barreras que limitan nuestra humanidad reprimida, reducen nuestras amistades a pequeños círculos y aprisionan nuestro amor universal. Defender y promover la vida se logra mediante “la fraternidad sin frontera, la amistad social y el amor político”: Esa es nuestra verdadera dimensión, porque ser humanos es ser hermanos sin restricciones algunas. Apostemos decididamente por la amistad.

Por RK