…Tengo paciencia y tú no la tienes, así que esa es mi ventaja. Tengo mi corazón que resbala y da vueltas en su propia sangre, y el tuyo esta desbaratado, revenido, y lleno de pudrición. Esa también es mi ventaja…
Juan Rulfo, El Llano en LLamas
Hoy Ecuador detenta la tristemente célebre estadística, en Latinoamérica, de ser la segunda Nación con mayor contagio y muertes derivadas del Coronavirus, después de Brasil.
También debemos resaltar, en detrimento del primero, que posee doce veces menos población que Brasil y es unas treinta veces más pequeño…
El oficialismo morenista le atribuye la responsabilidad a la desobediencia social solapando su propia ineficiencia gubernamental en la falta de un plan activo para enfrentar la crisis sanitaria con la debida anticipación.
Ecuador, dable es decir, cuenta con la mayor población migrante en España y seguramente este factor ha sido un foco de contagio relevante más la falta de articulación de un plan de crisis, trajo aún más calamidades.
El nuevo ministro de salud Zevallos resaltó, en un intento por mejor la imagen política de su gobierno, que a pesar de los números desfavorables fueron el país en tomar las medidas más estrictas a nivel social para contener la dispersión de la enfermedad.
Y en ello me quiero detener para destacar algunas cuestiones…
En primer término cabría cuestionarse por qué esperaríamos del gobierno de Lenin Moreno una respuesta activa, presurosa, concienzuda, aguda, pro activa y eficiente ante el coronavirus?
La realidad de su praxis gubernamental ,las impericias, omisiones o actos perpetrados en cumplimiento de mandatos externos nos harían abrevar en cierta premisa filosófica o científica sustentada en que si cometemos siempre los mismos errores sería un disparate esperar resultados exitosos… por lo tanto nada ha cambiado en la faz resultadista de este nueva crisis en la mitad del mundo.
En segundo término, y acerca de las extremas medidas tomadas por el Estado, no puedo dejar se denunciar la descarada e incontrolada represión que se ha podido observar (nuevamente) por parte de las fuerzas de seguridad sobre civiles. Lejos queda la legítima potestad del Estado en activar sus mecanismos más severos en pos del cumplimiento del aislamiento obligatorio más nunca dar “vía libre” a quienes, sabemos de antemano, también necesitan contralor especial en el uso de la fuerza.
Otra vez en el querido país experimentamos azorados ( o ya no tanto) excesos, malos tratos absolutamente desmedidos, represión en las clases trabajadoras y una matriz de violencia que solo puede originarse en órdenes indebidas de la superioridad.
Y cada una de esas decisiones, órdenes o planes de contingencia hacia esa presunta resistencia generalizada social a acatar las normas tienen su epicentro en las máximas autoridades políticas del país.
A imagen y semejanza de las que se vivieron hace meses, donde las fuerzas armadas de seguridad pre anunciaban un estilo y marca registrada morenista en lo que hace a la criminalización del descontento social.
Hoy, a diferencia de ayer, no les alcanza con los medios adictos o genuflexos a la pauta oficial. La “grieta” creada y alimentada por esa dupla política-mediática se ha vuelto boomerang y estalla en sus narices con una triste mueca de payaso de circo…
Lenin Moreno , esta vez con la excusa de su salud, se aparta de la escena haciendo jugar el partido a un inexperto vicepresidente.
Decisiones tardías que provocan muerte, zozobra pública, periodistas que no pueden sostener más la farsa y deben obligados por televidentes y oyentes, desenmascarar la inoperancia política.
Y mientras tanto el gobierno sigue pagándole al FMI, endeudando la Nación, pauperizando el ingreso social, intentando proscribir a la mayor fuerza de oposición real y efectiva representada por Rafael Correa, judicializando la política en forma aberrante, generando nuevas tácticas comunicacionales racistas, clasistas, de enfrentamientos sociales pergeñados desde oscuros escritorios, como si la crisis sanitaria fuera un tema menor…pensando que nuevamente una causa penal sacada de la galera de algún o alguna fiscal les “salva” el mes…
Hasta cuando podrá resistir la sociedad ecuatoriana tantos embates y en tan breve lapso temporal?
Los que amamos a ese país, los que abrazamos la causa latinoamericana no desconocemos que la crisis socio-económica que estamos padeciendo por este virus propagado no ha alcanzado su punto máximo y , como asegura la CEPAL , esta pandemia incrementará la pobreza y el desempleo en la región.
Para finalizar y en ese escenario futuro, nada distópico por cierto, cómo piensan que actuará el gobierno de Moreno?… ya tenemos la respuesta mis amigos…
Fuente: Nodal